Una compleja red criminal integrada por funcionarios municipales, delincuentes relacionados con el narcotráfico y una joven captadora de 23 años fue desarticulada tras operar durante al menos dos años desde la Dirección de Tránsito de Maipú, en la Región Metropolitana. Según la investigación, este grupo obtuvo ganancias superiores a los mil millones de pesos mediante la venta fraudulenta de licencias de conducir, documentos y patentes comerciales.
El caso salió a la luz tras un amplio operativo realizado en noviembre pasado por la Fiscalía Regional Occidente y la Brigada de Investigación Criminal de la PDI, que incluyó 55 allanamientos y la detención de 31 personas. Entre los imputados se encuentran funcionarios municipales activos, un ex trabajador de la Fiscalía y sujetos con antecedentes por narcotráfico. La investigación partió a raíz de denuncias ciudadanas que alertaron sobre irregularidades en la entrega de licencias, como la expedición sin exámenes ni controles, y la falsificación de certificados y evaluaciones.
Según declaró uno de los captadores, conocido como "Yayo", las licencias se vendían entre 380 mil y 450 mil pesos, aumentando a más de 600 mil para ciudadanos extranjeros. Los compradores recibían horas y certificados falsos y aprobaban los exámenes teóricos y prácticos con ayuda de funcionarios que facilitaban el proceso ilegal. Entre los involucrados figuraban Manuel Vilches, examinador práctico, y Juan Pablo Zúñiga, encargado del registro fotográfico.
La joven Paula Catalán Poblete, de 23 años, jugó un rol fundamental coordinando la captación de clientes a través de redes sociales y gestionando los pagos. Además, ofrecía patentes comerciales para negocios como botillerías y minimarkets, algunas de las cuales se vendían por hasta 5 millones de pesos. La Fiscalía continúa investigando posibles vínculos con otros funcionarios municipales y la existencia de licencias médicas falsas.