Un grupo de arqueólogos encontró ocho huevos de avestruz de a lo menos 4 mil años de antigüedad. Según la autoridad encargada del hallazgo, estarían en un estado de conservación “excepcional”.
El pasado 12 de enero, la Autoridad de Antigüedades de Israel, dio a conocer el hecho y mencionó que esto ayudará a conocer más sobre cómo vivían los nómadas del desierto.
El hallazgo se hizo al sur de Israel, en cercanías de la frontera con Egipto, los fragmentos exhumados estaban en el desierto de Néguev.
Estos fueron encontrados cerca de un fóculo, el cual es un lugar en donde encendían fuego. Entre piedras y herramientas, algunas hechas con cerámica; en el sitio, los nómadas acampaban “desde tiempos prehistóricos”. Además, se cree que ellos cocinaban los huevos de avestruz.
Estos huevos de avestruz podrían tener entre 4 mil a 7 mil 500 años
Esas serían las estimaciones, según el organismo especialista en antigüedades. Por otra parte, informaron que estas especies de avestruces salvajes desaparecieron de la región, en el siglo XIX.
Por lo cual, el hallazgo servirá para conocer más de los nómadas que dejaron pocas huellas sobre su estilo de vida.
Finalmente, los fragmentos serán reconstruidos “como un puzle”, para saber a qué especie pertenecieron y cuál era la utilidad que se les daba, con exactitud.